ARQU 3177 Sostenibilidad y Arquitectura

La técnica es por excelencia una actividad humana. Es por medio de ella que nuestra especie ha podido transformar el mundo natural, adaptándolo para sobrevivir y para conseguir su bienestar. El progreso de la técnica significó, desde los albores de la humanidad, la construcción de una segunda naturaleza, de un nuevo mundo de apoyos y relaciones artificiales sobre los que se afianzó la historia y se estructuró la cultura. Durante siglos, la energía consumida en esa construcción se mantuvo dentro de ciertos límites, estrictamente resguardados por la fuerza física disponible, por el aprovechamiento primario de la ley de la gravedad y de la energía del sol, los vientos, el agua y los combustibles renovables. Hace poco más doscientos años, al hacer conciencia nuestra especie de la enorme potencia que adquiría el carbón gracias a la invención de la máquina de vapor, el desarrollo técnico se aceleró exponencialmente, creciendo en similar medida la demanda energética para soportar la inédita capacidad de producción y el apetito de los nuevos mercados de ella derivados. Poco después, como en un alud, el inicio de la explotación en gran escala del petróleo y la invención del motor de gasolina se sumaron al proceso de consolidación de esa segunda naturaleza, que crecía a expensas del equilibrio ecológico del mundo natural. Adicionalmente, el dominio de la electricidad puso a disposición de la especie humana nuevas e ingentes cantidades de energía, que en el siglo XIX permitieron a pensadores como Victor Hugo proclamar esperanzado que el progreso técnico redimiría al ser humano.

Créditos

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Periodo en el que se ofrece el curso

202010 - 202020

Idioma en el que se ofrece el curso

Español