El Taller de Proyecto Integrador sintetiza los contenidos, habilidades y actitudes de los Ciclos Fundamentar y Comprender, transformándose en la columna vertebral del Ciclo Integrar. La acción de mezcla, tanto de estos contenidos previos como de aproximaciones específicas y propias, le dan a este taller la capacidad de convertirse en un motor de exploración proyectual desde la aproximación al edificio y sus diversas escalas.
Trabajaremos en parejas de profesores, para integrar aproximaciones, multiplicar conocimientos y diversificar las miradas sobre el proyecto, en un debate que enriquecerá las posiciones de cada estudiante. Este taller será un punto de inflexión y reflexión antes de continuar a las unidades de profundización. Procuraremos establecer procedimientos de proyecto y hacer rigurosas especulaciones de diversas partes y elementos del edificio, siempre desde una lógica sistémica y medianamente compleja.

¿Qué es una imagen? ¿Cuáles son los soportes de la imagen? ¿Cómo afecta el movimiento a la imagen? ¿Se puede entablar un diálogo entre las artes a través de la imagen? Cómo arquitectos, ¿podemos proyectar con imágenes? La Unidad se interesa por las relaciones de la arquitectura con las prácticas artísticas desde un marco amplio que involucre diversas culturas (la cultura occidental, las culturas no occidentales, las culturas ancestrales y también nuestras vivencias personales más próximas). Al pensar en la relación de las artes con la arquitectura, solemos pensar en un matrimonio bien habido y culto entre un arte elitista y una arquitectura sofisticada. La unidad quiere voltear esa relación que deja por fuera el arte doméstico o la artesanía, para de esa manera, buscar y reconocer la dimensión artística que tiene nuestro cotidiano habitar propio. Algo que nos permite vincular dichas prácticas artísticas es que son soporte de una gestualidad común, de la que la imagen da buena cuenta. De esta manera, quizás podemos plantear una mirada inclusiva y contemporánea que integra nuestros intereses en constante diálogo y que podría estar delimitada por tres “marcos”:

1. La imagen y los distintos soportes (estáticos, en movimiento, temporales, permanentes, …).

2. La constancia de la imagen en las culturas occidentales, no occidentales, en las culturas ancestrales y en la vivencia personal de cada estudiante.

3. La naturaleza de la imagen, su resistencia.

Ha habido varios intentos de abarcar las artes a través de las imágenes. Warburg y su proyecto "Atlas Mnemosyne", Malraux y su "Museo imaginario", Jean-Christophe Bailly y su "Taller infinito", etc. La imagen es igualmente inabarcable. Sin embargo, optamos por interrogar la relación entre las culturas, las prácticas artísticas y la arquitectura desde la imagen porque consideramos que hoy en día plantea más interrogantes e inquietudes y matices que el universo de la estética. La Unidad surge de intereses personales de investigación y docencia de los profesores que la componen, quienes consideramos que la imagen y su movimiento ha permeado la totalidad de las prácticas culturales, por lo que nos permite plantear una mirada inclusiva y contemporánea. Para delimitar el objeto de estudio, nuestras reflexiones sobre la imagen y el proyectar con imágenes giran alrededor de una acción cotidiana y al mismo tiempo ritual: “poner la mesa”.

Este curso plantea la simulación del flujo de trabajo inherente al diseño y coordinación técnica de un edificio de usos múltiples. El objeto es construir una experiencia cercana al ejercicio profesional donde los arquitect@ no solo debe generar un planteamiento espacial en coordinación con los diferentes sistemas del edificio, sino liderar procesos comunicativos entre varias disciplinas para garantizar condiciones óptimas en términos de estabilidad estructural, funcionalidad y habitabilidad.   Para la realización del proyecto, los estudiantes deberán construir modelos tridimensionales basados en información con el fin de generar cuerpos de información lo suficientemente robustos que habilite la coordinación y despliegue de los diferentes sistemas del edificio en línea con la definición arquitectónica.     Para esto, se plantea que el curso tenga una instancia de revisión y evaluación de avance de diseño y coordinación y, paralelamente, otra donde existan workshops con expertos en el diseño de sistemas técnicos para garantizar la coherencia de la arquitectura con el sistema estructural, de cerramiento exterior e iluminación, ventilación, particiones interiores y desempeño térmico.   El Proceso Integrado de Proyecto o IPD es una metodología que comprende el ciclo de vida del edificio desde sus fases iniciales de factibilidad y conceptualización hasta su operación y desmonte. Dadas las capacidades tecnológicas disponibles en las herramientas informáticas que hacen posible la construcción de cuerpos de información que permiten optimizar procesos de diseño y construcción, IPD se ha venido posicionando, ya sea de manera parcial o total, como un estándar de la industria para el desarrollo de proyectos. Teniendo esto en cuenta, se propone esta unidad porque propone desarrollar competencias que bien podría generar no solo capacidades que haría que futuros egresado@s sean competitivos tanto local como internacionalmente en el ámbito de diseño y desarrollo de proyectos, sino también despertar en ell@s posibles rutas profesionales que bien podrían influenciar en la escogencia de una especialidad, líneas de investigación y/o elección de programas de posgrado.

El currículo establece un ciclo de profundización “…con Unidades de Profundización de ocho semanas cada una y cuatro Electivos de Profundización. Estos cursos les ofrecen a los estudiantes tres énfasis de conocimiento [Social, Artes y Humanidades, Tecnológico] para optar por una temática específica o una combinación según sus propios intereses, donde las cinco competencias son transversales…”. Este ciclo se caracteriza como el ciclo donde el estudiante desarrolla temáticas y competencias con un espíritu de experimentación dentro de lo que para esta unidad representaría un laboratorio de arquitectura. ­ El laboratorio se hace énfasis en la línea de profundización de la Artes y Humanidades, en concordancia con los lineamientos propuestos por el currículo:

“…Una aproximación a la arquitectura abierta al pensamiento filosófico que le permita encontrar la síntesis entre la imaginación y la memoria, entre la intuición y la razón, enriquecida con los desafíos y preguntas que se comparten con otros campos del saber.”

“…En este énfasis se busca contribuir en la educación en la arquitectura con una aproximación que trascienda los aprendizajes útiles para proporcionar bellas enseñanzas y aspirar a bellas arquitecturas.”

“…En los cursos de este énfasis se abordan reflexiones sobre la relación entre una educación estética…”

“…Aunque en este énfasis se abre el espectro para abordar la arquitectura desde el arte, las ciencias y las humanidades, no se abandona el esfuerzo por aprender arquitectura desde la propia arquitectura. La arquitectura tiene sus propias leyes, unas narrativas particulares, un grupo ineludible de referentes, sintaxis que organizan los espacios en conjuntos espaciales. Estas lógicas merecen ser estudiadas en su autonomía disciplinar como parte del proceso educativo.” ­ El curso propone una indagación de los elementos de la arquitectura y cómo desde estos se pueden entender los hechos de la arquitectura y de allí, formular el proyecto de arquitectura. El entendimiento de una serie de elementos que participan fuertemente en la experiencia de la arquitectura, centra la mirada a nuestra relación con ellos y cómo, a través de ellos, se entiende el mundo. 

Esta unidad centra su atención en dos temas asociados al énfasis tecnológico. Por un lado, el trabajo y aproximaciones de diseño desde ciertas herramientas tecnológicas (software y hardware), pero en nuestro caso, centrados específicamente en la interacción con el brazo robótico, para profundizar en la implementación de estrategias de diseño, que puedan amplificar lo aprendido en ciclos anteriores. Por otro lado, el prototipado avanzado como el proceso de exploración que permite profundizar y cuestionar temas disciplinares a través nuevas técnicas. Estos dos aspectos provienen de la asociación o afinidad en campos cercanos de investigación en arquitectura desde la experiencia previa de los profesores.

La unidad se define como un espacio de trabajo transdisciplinario que tiene como objetivo investigar, identificar y proponer nuevas aproximaciones al proyecto, desde diversos patrones disruptivos, para promover una discusión sobre el futuro de nuestra disciplina. Con la aplicación de las tecnologías, la arquitectura ha entrado en un período de transición, del primero al segundo giro digital, que abarca el tiempo necesario para traducir las consecuencias de esta revolución digital de finales del siglo XX y principios del XXI en una nueva realidad arquitectónica. Este desarrollo tecnológico conlleva cambios en los procesos y conceptos que determinan tanto el diseño como los regímenes estéticos en nuestro oficio. Esta unidad se concentra entonces, en la investigación del diseño mediante el despliegue de nuevas herramientas, medios y modalidades de flujo de trabajo con la tecnología para construir, transformar y provocar nuevas posibilidades en la arquitectura.

En la actualidad, cuando hablamos del segundo giro digital, también llamado “postdigital”, debemos recordar que todos (incluyendo los arquitectos) somos agentes culturalmente digitales y digitalmente culturales. No podemos desprender esta realidad tecnológica de los asuntos más enraizados del debate de en nuestro oficio.

La Unidad “Desde y hacia una escala humana” propone el desarrollo de una arquitectura que articule las necesidades de una comunidad particular con las propuestas de promotores y administración. Se trata de una arquitectura intermedia entre el urbanismo bottom up, de carácter efímero, y la arquitectura tradicional construida con materiales de larga duración. Es una arquitectura que, por sus procesos de desarrollo, la utilización en lo posible de materiales de bajo costo y las técnicas utilizadas, permiten su construcción mediante procesos colaborativos con la comunidad.

El curso de proyectos se centra en la actividad humana como detonador de nuevas arquitecturas que transformen la ciudad construida; estas arquitecturas serán desarrolladas sobre espacios urbanos que representen oportunidades de intervención. Su objetivo es analizar hábitos urbanos, buscando identificar la relación de los habitantes con el espacio vacío y con los edificios, con el fin de formular estrategias detonadoras de dinámicas y procesos sociales y la formulación de acciones u operaciones que permitan su materialización. Este enfoque pone sobre la mesa temas que por lo general están ausentes en el planeamiento de la ciudad.

Así, los fragmentos de ciudad observados, las arquitecturas y los habitantes, serán decisivos en la resolución de los proyectos; los detalles, las formas de vida y la intuición deberán formar parte de la generación de nuevas dinámicas que transformen no sólo los espacios físicos, sino también las relaciones sociales. Para esta Unidad, actuar sobre la ciudad no será únicamente resolver problemas, sino resaltar la riqueza y significado de los lugares, crear lugar donde no existe, introducir nuevos elementos de referencia, generar carácter y clarificar las situaciones que potencialicen el sitio.

Los proyectos por desarrollar en este curso pueden definirse como locales (por su interés comunitario), creativos (por ser innovadores y hacer experimentación), de una duración de mediano plazo (por ser temporales, no definitivos), de bajo costo (por su compromiso social), informales (por su carácter espontáneo y no reglado) y regeneradores (por especializarse en la renovación de áreas en estado de abandono)1 .

Por su parte, en el curso de herramientas se apoyará el proceso del proyecto a partir del desarrollo e implementación de metodologías de trabajo con la comunidad en donde se identifiquen actores, procesos de gestión y diálogo y se estudien otros referentes similares. Se recolectarán también las experiencias de trabajo en las comunidades a partir de la identificación de saberes y recursos con los que se cuenta 3 en el lugar de trabajo. Se trata de potenciar estas experiencias para reinterpretarlas y/o aplicarlas según las situaciones que se presenten.

La Unidad propone la aplicación del aprendizaje activo en donde las enseñanzas no provienen únicamente de los resultados obtenidos, sino de los procesos de intercambio con otros y de la construcción de comunidad que implica su desarrollo. Por lo tanto, es una oportunidad para que, a partir de experiencias en el mundo real, estudiantes, profesores y comunidades amplíen su conocimiento. Las experiencias afirman que cuando a los estudiantes se les revela la ciudad de esta forma, miran con respeto los lugares anónimos, olvidados, deteriorados y los ven como espacios potenciales para la acción colectiva y la revitalización.

Salón Selva: Tecnología(s) Multiespecie hace parte de un proceso en marcha por concebir nuevas formas de arquitectura educativa. Enmarcado como un primer aporte que se realiza desde el Departamento de Arquitectura de la Universidad de los Andes para la co-creación de dos centros educativos ubicados en Nuquí, Chocó y Piamonte, Cauca, el curso propone construir un catálogo de ensamblajes bio-culturales que emergen de los entornos vivos del Golfo de Tribugá y el Piedemonte Andino-Amazónico. La unidad es un taller teórico-práctico de investigación-por-diseño. Se producen medios investigativos a través de la co-producción crítica de proyectos arquitectónicos compuestos por imágenes, sonidos y experimentos materiales. A lo largo del curso se reflexiona en torno a cómo puede la arquitectura ser un medio en los territorios para encaminar el buen vivir de todos los seres, humanos y más que humanos, y cómo por medio de la descolonización del pensar racional humano se puede evolucionar a nuevas interacciones entre las diversas formas de vida del planeta. Como parte de los esfuerzos de dar continuidad investigativa a los procesos previos de reflexión decolonial en torno a paisaje y arquitectura, estaremos trabajando con y desde el archivo de Radio Manglar. Se reconocerá el contenido alojado en los canales del colectivo RADIO MANGLAR, revisitando procesos de archivo de conocimiento generado en el departamento como insumo pedagógico para informar desde los frentes del activismo político, social y ambiental, formas de habitar mares, mareas, manglares, volcanes y jardines.

La emergencia climática ha puesto de manifiesto la necesidad de generar un mayor compromiso ético respecto a la forma en que intervenimos el territorio. Esto implica poner en evidencia los impactos y las externalidades de la arquitectura y la industria de la construcción, para generar alternativas desde una perspectiva “glocal”.

Esta unidad ofrece al estudiante herramientas para re-pensar la materialidad en la Arquitectura y demás campos creativos, a través del entendimiento directo, la interacción, manipulación y creación de materias primas, mediante la aplicación de procesos originados en el diseño computacional, y orientados hacia la fabricación y manufactura digital.

Se estima que para el año 2050, la demanda de vivienda e infraestructura va a ser equivalente a construir de nuevo lo que hemos construido hasta ahora, o construir una ciudad como Nueva York, cada mes, durante los próximos cuarenta años. Esta situación, implica una profunda preocupación en relación a la forma en que se ha venido adelantando este rápido proceso de transformación, y los parámetros que darán forma a las edificaciones del futuro.

 

Actualmente, la industria de la construcción es responsable de un porcentaje importante de las emisiones de gases de efecto invernadero que impulsan la emergencia climática global, entre otra serie de externalidades que afectan el territorio en términos de sostenibilidad. Por tanto, uno de los principales retos de la arquitectura en su componente ético tiene que ver con la necesidad de desarrollar procesos que permitan satisfacer las necesidades básicas de un hábitat digno explorando y aprovechando herramientas tecnológicas, pero sobre todo generando formas críticas y creativas de aproximarse a los procesos en que se diseñan, producen y usan los materiales.

 

Tanto en la implementación de nuevas tecnologías en la materialidad arquitectónica, como en la urgencia de soluciones para enfrentar la emergencia climática, la localidad es un concepto recurrente. En los proyectos que la NASA ha venido desarrollando recientemente para construir asentamientos en la Luna y Marte, el común denominador de las soluciones y propuestas vigentes, se basan estrictamente en la extracción, procesamiento, y máximo aprovechamiento de los recursos locales, no sólo a nivel de material, sino también, de herramientas y tecnología. A todas las escalas, el manejo de la energía, es fundamental y apunta a la localidad y la optimización.

 

Sin ir tan lejos, durante la emergencia del COVID-19, la localidad también ha estado presente. Las restricciones en los horarios, las rutinas, el transporte, los suministros, y las formas de operar en general, abordaron la localidad como una oportunidad de cambio. La gente empezó a acudir a las tiendas cercanas y los servicios locales encontraron nuevas formas de funcionar. En emergencias más catastróficas como la que ocurrió recientemente en San Andrés, o terremotos, hambrunas, erupciones volcánicas, inundaciones y demás catástrofes venideras como consecuencia del cambio climático, la localidad es un término que tiene toda la relevancia, y que, como arquitectos, nos obliga a imaginarnos nuevas maneras de construir y hacer.

 

Por tanto, las nuevas tecnologías y avances en el campo computacional, que están fundamentadas en la utilización de lenguajes universales de codificación y programación que trascienden la clasificación tradicional de las disciplinas que conocemos, aparecen como una herramienta fundamental para avanzar en estos procesos de innovación material. Hoy en día, en la misma mesa podemos imprimir una prótesis dental, y al instante, imprimir un componente estructural para un pabellón. Los robots industriales, o brazos robóticos, por ejemplo, son herramientas supremamente útiles que siguen órdenes y realizan trabajos que el hombre no podría, y basta con hacer un cambio de herramientas para que la actividad que se realice sea completamente diferente.

 

En este sentido, la academia tiene un rol fundamental a la hora de propiciar los espacios de reflexión que den origen a procesos de innovación, y en particular para la facultad de arquitectura de la Universidad de los Andes, con la entrada de vigencia del nuevo pensum académico y la apertura a la exploración transdisciplinar y el pensamiento computacional, está llamada a asumir un rol protagónico en este campo.

Las decisiones físico-espaciales que provee la arquitectura impactan la calidad de vida de la ciudadanía. Apelar a la igualdad de derechos individuales y colectivos a partir del espacio público y del privado, contribuye a evitar situaciones de discriminación, subordinación y violencias contra las mujeres. Este curso de profundización en la categoría de énfasis social atiende un llamado urgente por incorporar los enfoques de género y diferencial en la formación del pregrado en arquitectura.

Propone fortalecer habilidades que faciliten asumir un rol activo desde el diseño arquitectónico en el diálogo transdisciplinar. Para ello se estudiarán referentes
arquitectónicos internacionales y nacionales (como los Beguinatos, Boudoir, Acllayasi, Frauen-Werk-Stadt, las Casas Pao y de arrepentidas, entre otros) y se aplicarán técnicas de recorrido exploratorio incluyentes, bases para el desarrollo de un proyecto a escala arquitectónica/urbana, articulado a la Manzanas del Cuidado #24, institucionalizadas en Bogotá por el Sistema Distrital de Cuidado (SIDICU).

El curso de proyecto alineado con el curso de herramientas, aclarará aspectos conceptuales acerca de enfoques, equidad e igualdad, así como su incorporación en instrumentos públicos que definen lineamientos de planeación urbana de impacto en la arquitectura, y el acercamiento tanto a problemáticas arquitectónico/urbanas (percibidas especialmente por mujeres) como a entidades gubernamentales en particular a la Secretaría Distrital de la Mujer y al Instituto Distrital de Patrimonio Cultural.

En una aproximación práctica complementaria, se reconocerán diferencias en los patrones del uso del tiempo y del espacio, según las identidades de género, a partir del propio cuerpo, sus condiciones y dimensiones, en relación con las labores productivas y reproductivas transversales realizadas en el cotidiano vivir. Esto permitirá a quien diseña ser más sensible y responder de manera adecuada a las particularidades de aquellos cuerpos y realidades que, en sus diversidades, requieren de la arquitectura la máxima atención. Una mucho mayor que la prestada cuando se proyecta el territorio para un público supuestamente neutral que produce una igualdad desigual.

El hecho de interactuar con residentes e interesadas directas en la manzana del cuidado seleccionada, espera fomentar la disposición para escuchar y dar valor a la experiencia y vivencia de quien habita sus realidades en otros cuerpos, a interiorizar en el encuentro con mujeres habitantes cercanas a la zona objeto de estudio. A su vez se espera activar la creatividad de las y los estudiantes en el taller de diseño arquitectónico para el desarrollo de la manzana del cuidado ideal, constituida a partir de piezas urbano arquitectónicas, expresadas formalmente en la vivienda, la movilidad y el espacio público, en apuestas ambientales, paisajísticas y patrimoniales, como en la localización y caracterización de equipamientos de soporte para la vida cotidiana.

El currículo establece un ciclo de profundización “…con Unidades de Profundización de ocho semanas cada una y cuatro Electivos de Profundización. Estos cursos les ofrecen a los estudiantes tres énfasis de conocimiento [Social, Artes y Humanidades, Tecnológico] para optar por una temática específica o una combinación según sus propios intereses, donde las cinco competencias son transversales…”. Este ciclo se caracteriza como el ciclo donde el estudiante desarrolla temáticas y competencias con un espíritu de experimentación dentro de lo que para esta unidad representaría un laboratorio de arquitectura. ­ El laboratorio se hace énfasis en la línea de profundización de la Artes y Humanidades, en concordancia con los lineamientos propuestos por el currículo:

“…Una aproximación a la arquitectura abierta al pensamiento filosófico que le permita encontrar la síntesis entre la imaginación y la memoria, entre la intuición y la razón, enriquecida con los desafíos y preguntas que se comparten con otros campos del saber.”

“…En este énfasis se busca contribuir en la educación en la arquitectura con una aproximación que trascienda los aprendizajes útiles para proporcionar bellas enseñanzas y aspirar a bellas arquitecturas.”

“…En los cursos de este énfasis se abordan reflexiones sobre la relación entre una educación estética…”

“…Aunque en este énfasis se abre el espectro para abordar la arquitectura desde el arte, las ciencias y las humanidades, no se abandona el esfuerzo por aprender arquitectura desde la propia arquitectura. La arquitectura tiene sus propias leyes, unas narrativas particulares, un grupo ineludible de referentes, sintaxis que organizan los espacios en conjuntos espaciales. Estas lógicas merecen ser estudiadas en su autonomía disciplinar como parte del proceso educativo.” ­

El curso propone una indagación de las reglas geométricas y figurativas de los trazados en la definición de la espacialidad de los proyectos. 

En este curso trabajaremos en dos frentes. Por un lado vamos a reflexionar sobre los ornamentos que nos acompañan y han acompañado en nuestra propia vida, su importancia y significado, e incluso a veces su presencia insignificante; y por otro lado estudiaremos diferentes posiciones sobre el valor del ornamento, desde la aparente condena de Adolf Loos en “ornamento y delito” hasta la reivindicación que de él hacen expertos en historia del arte como Aby Warburg en su trabajo sobre la memoria y la imagen registrados en sus famosos paneles que componen el “Atlas mnemosyne”. Estos serán insumos que apoyarán los ejercicios del taller.

En este curso de Herramientas los estudiantes de la Unidad de Profundización De la Coordinación Técnica a la Forma del Proyecto conocerán herramientas BIM (Building Information Modeling) para formular una estrategia de colaboración para el proyecto de edificación interdisciplinario y complejo que deben desarrollar por equipos en el curso de Proyectos. El objetivo del curso es orientar los procedimientos, metodología y herramientas de software para abordar el desarrollo de un proyecto de arquitectura y diseño integral de todas las disciplinas que intervienen en la definición constructiva del edificio. En cada equipo de trabajo, los estudiantes deberán planear cómo van a construir el cuerpo de información de su proyecto, las reglas para la toma de decisiones y el intercambio y revisión de los aportes individuales al grupo, para poder perfeccionar constantemente el grado de coordinación entre los componentes del proyecto que tiene cada estudiante a su cargo.

Las actividades, contenidos y trabajos y evaluación del curso de herramientas consisten en aspectos y documentos de la planeación de la estrategia de colaboración del proyecto de diseño. 

El curso de instrumentación aborda la problemática de la representación y de la comunicación de proyectos desde una óptica plástica y sensorial, que busca potenciar y desarrollar el componente creativo y la sensibilidad artística del estudiante. El curso propone la experimentación con herramientas gráficas y plásticas tradicionales, combinadas con propuestas y experiencias artísticas en torno al tema propuesto, la ventana. Dibujo sobre fotografía, collages, fotomontajes y otras combinaciones, confieren nuevas dimensiones a la presentación de un proyecto, y hacen que el dibujo sea más que una simple descripción.

Esta unidad centra su atención en dos temas asociados al énfasis tecnológico. Por un lado, el trabajo y aproximaciones de diseño desde ciertas herramientas tecnológicas (software y hardware), pero en nuestro caso, centrados específicamente en la interacción con el brazo robótico, para profundizar en la implementación de estrategias de diseño, que puedan amplificar lo aprendido en ciclos anteriores. Por otro lado, el prototipado avanzado como el proceso de exploración que permite profundizar y cuestionar temas disciplinares a través nuevas técnicas. Estos dos aspectos provienen de la asociación o afinidad en campos cercanos de investigación en arquitectura desde la experiencia previa de los profesores.

La unidad se define como un espacio de trabajo transdisciplinario que tiene como objetivo investigar, identificar y proponer nuevas aproximaciones al proyecto, desde diversos patrones disruptivos, para promover una discusión sobre el futuro de nuestra disciplina. Con la aplicación de las tecnologías, la arquitectura ha entrado en un período de transición, del primero al segundo giro digital, que abarca el tiempo necesario para traducir las consecuencias de esta revolución digital de finales del siglo XX y principios del XXI en una nueva realidad arquitectónica. Este desarrollo tecnológico conlleva cambios en los procesos y conceptos que determinan tanto el diseño como los regímenes estéticos en nuestro oficio. Esta unidad se concentra entonces, en la investigación del diseño mediante el despliegue de nuevas herramientas, medios y modalidades de flujo de trabajo con la tecnología para construir, transformar y provocar nuevas posibilidades en la arquitectura.

En la actualidad, cuando hablamos del segundo giro digital, también llamado “postdigital”, debemos recordar que todos (incluyendo los arquitectos) somos agentes culturalmente digitales y digitalmente culturales. No podemos desprender esta realidad tecnológica de los asuntos más enraizados del debate de en nuestro oficio.

El curso de herramientas busca fortalecer y complementar el proceso de formulación del proyecto arquitectónico, incorporando metodologías y aproximaciones que le permitan al estudiante comprender el contexto social en medio del cual emerge el escenario de trabajo. Esto, con el objetivo de generar propuestas más pertinentes, en las que se reconozca la complejidad de las relaciones humanas que tienen lugar en los espacios físicos en los que desarrolla la vida cotidiana.

La reflexión académica sobre la ciudad de origen informal ha tenido en la Facultad de Arquitectura y Diseño distintas aproximaciones que constituyen antecedentes importantes para la formulación de esta Unidad de Profundización. Desde cursos de hace más una década como los Laboratorios de Vivienda y Planeación, cuyos resultados se consolidaron en procesos de investigación publicados como avances metodológicos1 y la reciente Unidad intermedia Ciudad Informal, en la cual se abordaron ejercicios académicos con contenidos y metodologías significativas para avanzar en el propósito general de reconocimiento de las dinámicas territoriales que propicien mayor pertinencia y sostenibilidad en las intervenciones proyectuales.
A los anteriores procesos, se suman otros insumos de docencia e investigación como los relacionados con los equipamientos como componente urbano y las opciones de gestión de nodos de equipamientos zonales, que evidencian las oportunidades de intervención para una ciudad inclusiva y equitativa2. En su conjunto, la trayectoria académica y la motivación de los profesores por estar cerca de las propuestas que se adelantan en la ciudad en relación con los planes de desarrollo y ordenamiento territorial, constituyen soporte importante para esta propuesta.

Esta Unidad se enmarca en el énfasis social y propone acercar al estudiante de manera explícita al reconocimiento de las dinámicas sociales y culturales de la ciudad autogestionada, apoyando programas y procesos en marcha que visibilicen el reconocimiento de las oportunidades de la arquitectura desde la gestión de los procesos en los ámbitos locales y barriales, en esta oportunidad en la ciudad de Bogotá.
En ese sentido propuestas recientes en Bogotá como el Sistema Distrital de Cuidado, las aproximaciones territoriales con los distritos y manzanas de cuidado,3 son oportunidades significativas para ofertas académicas como las que se ofrecen en las unidades de profundización. Apoyándose en este estos programas y estrategias se propone seleccionar para el curso una localidad y un distrito de cuidado4que permite el acceso a la información cartográfica y de contexto, como también, avanzar en los contactos requeridos con los funcionarios públicos pertinentes que propicien los acercamientos a los actores locales requeridos para cumplir con las apuestas metodológicas de observación y reconocimiento de actores y proceso que se expondrán más adelante.

Interesa también sumarse a intervenciones públicas de gran escala para entender las oportunidades del territorio y consolidarlas con las propuestas arquitectónicas que se desarrollen en la Unidad. Este semestre se propone acercarse a la localidad de San Cristóbal, sector urbano de alta significación por la aplicación de programas y proyectos en marcha en la ciudad de Bogotá, particularmente con la formulación del proyecto del Cable aéreo de San Cristóbal, que en diseños preliminares propone la construcción de dos estaciones en la zona alta de la localidad, en los barrios la Victoria y Altamira, donde además se vinculan acciones de la estrategia de ciudad cuidadora con la formulación de las denominadas manzanas del cuidado.

Desde el curso de Herramientas se desarrollarán los instrumentos y los métodos que permitan profundizar en la comprensión de la ciudad espontánea con dinámicas de desarrollo progresivo. Interesa desarrollar con los estudiantes una lectura de territorio que partiendo de las características socio culturales y físicas desde el reconocimiento de las particularidades de la trayectoria en su consolidación, permita comprender, como propósito general, la intervención desde la arquitectura que incida de manera decidida en la condición de desarrollo y acompañen dinámicas de productividad y bienestar para la comunidad.

Esta clase busca introducir los elementos narrativos del cine (forma y estilo) con dos objetivos principales: 1. Adquirir las herramientas básicas para ser capaces de construir (escribir, producir y editar) su propio relato audiovisual. 2. Expandir la visión y creatividad de los estudiantes frente a sus proyectos arquitectónicos. Con respecto a la creación de su propio relato audiovisual, el proyecto final de la clase será un cortometraje de 5 a 10 minutos cuyo tema es el libre, pero debe estar relacionado con la investigación realizada por los estudiantes en Salón Selva.

El público objetivo de estos cortometrajes serán los niños de la organización Veanvé en el Chocó.

Por eso es muy importante desarrollar historias sencillas, pero con un importante valor de conocimiento. El objetivo final de estos proyectos es servir como archivo para la organización Veanvé.

La revolución digital que vive el mundo hoy, también definida por el Historiador de Arquitectura Mario Carpo como ‘El segundo giro digital’ en su libro que lleva el mismo nombre (1), trae consigo una inevitable y radical transformación en los procesos de diseño y fabricación. Esta transformación en los campos del hacer, tiene como cimiento la lógica computacional para la solución de problemas, haciendo uso del ordenador como vehículo principal para la exploración de nuevas aproximaciones al momento de crear, manipular y transformar la materia.

El auge de las avanzadas capacidades de procesamiento de datos y almacenamiento de la información, hoy al alcance de todos, ha modificado la manera en la que nos relacionamos con los demás, con nuestro entorno. Ha permitido también, escalar los campos de interacción multidisciplinar a través de flujos de trabajo digitales y la solución de problemas con una perspectiva algorítmica y mereológica.

El curso de Herramientas busca como primera medida fortalecer los instrumentos y mecanismos de diseño algorítmico y dominio de software, a través de los cuales se explorarán diferentes metodologías para la ejecución de proyectos de arquitectura y manufactura por medio de la utilización de nuevas tecnologías y técnicas de fabricación digital. Los conceptos trabajados en el curso se plantean como un apoyo indispensable, paralelo y correlacionado con los escenarios planteados en la clase de Proyecto. 

La problemática que aborda el curso cuestiona directamente una forma única de habitar la ciudad, a partir de la revisión de distintos discursos y prácticas elaboradas desde y
fuera del feminismo con relación al entorno construido. Presenta herramientas de análisis inspiradas en la necesidad de reconocer y aplicar metodologías, estrategias, conceptos y teorías sobre los principales cuestionamientos planteados con enfoque de género y diferencial, los cuales se expresan espacial y territorialmente en múltiples formas de habitar.

Se revisarán, además, agendas ciudadanas construidas colectivamente, así como los principales retos contemporáneos, para procurar una arquitectura y ciudades sin desigualdades de género e incluyentes de las diversidades. Los contenidos del curso deberán reflejarse concretamente en las propuestas arquitectónicas presentadas en el curso de Proyecto: ARQT 3209 Arquitectura con enfoque de género y diferencial, el cual propone fortalecer habilidades para asumir un rol activo desde el diseño arquitectónico en el diálogo transdisciplinar.

El planteamiento general de este curso permitirá a las y los estudiantes aclarar matices conceptuales, entre otros, respecto a identidades de género, diversidades,orientaciones sexuales e interseccionalidades, así como aproximarse a los discursos teórico-prácticos que maneja cada invitada nacional e internacional a través de contenidos acerca de la movilidad, las interdependencias, la participación ciudadana, las luchas y los derechos de las mujeres, a traducir en criterios arquitectónicos.

Serán, además, la lectura y el análisis de textos escogidos -entre agendas ciudadanas, normas institucionales e instrumentos globales- y de un recorrido patrimonial guiado por el centro histórico de Bogotá con visita a esculturas de silueta femenina y espacios representativos para las mujeres, fundamento y estímulo para la construcción de un manifiesto colectivo de esta cohorte, la estrategia para consolidar entre el grupo de estudiantes un pensamiento crítico de la arquitectura con enfoque de género  diferencial retroalimentado en la escucha, observación, experiencias, dilemas, diálogos, debates, consensos, disensos y concertaciones.

El curso propone una experimentación sobre los elementos básicos de la forma entendida como representación visual y figurativa. Esto significa una práctica perceptiva, visual y relacional [compositiva] en la manipulación de los elementos más básicos de la forma: el punto, la línea y el plano. Todo ello se debe entender en relación con un marco de referencia, es decir la figura donde están contenidos los elementos, haciendo presente la relación entre ellos, en su conjunto y con la figura que los contiene. Para hacer la exploración, se propone utilizar el cuadrado como base dentro de una serie de ejercicios que conduzcan a la exploración de los aspectos antes mencionados.

Con ello, entendido como la estructura profunda del fenómeno figurativo, y con los demás componentes que constituyen el hecho arquitectónico, como son la estructura formal, la estructura portante, la relación sintáctica de los elementos, las reglas compositivas, entre otros, cada arquitecto define una gramática con la cual trabaja. Con los cursos de Proyectos y de Herramientas, la unidad debe ser entendida como un campo de experimentación, a la manera de laboratorio, y pone como objeto de estudio la construcción de la figura como valor de ensayo.

Este curso ELECTIVO de PROFUNDIZACIÓN de ÉNFASIS SOCIAL se propone como un espacio académico para la reflexión sobre el origen de los asentamientos informales en nuestro contexto y su comprensión como un proceso, una ciudad dinámica y en constante transformación, cuyo principal valor es que son construidos por sus habitantes.

Este curso aporta al énfasis social en cuanto aborda el fenómeno de los asentamientos informales como parte fundamental de nuestro contexto y relaciona el rol de la arquitectura y del arquitecto en su mejoramiento y transformación. Estos asentamientos son considerados por Conolly (2013) como el paradigma socio-espacial de América Latina, lo cual se refleja en un informe reciente de la CAF (2017) donde se estima que entre el 20% y el 30% de la población en nuestra región vive en asentamientos de origen informal, frente a una media mundial de 10%. Es indudable que estos asentamientos no sólo constituyen una gran proporción de nuestras ciudades, sino que son una parte dinámica de las mismas en terminos físicos, sociales y culturales.

 

La asignatura se centra en los movimientos urbanos de base como agentes urbanos fundamentales en la construcción de ciudad de abajo arriba (bottom-up), ya sea a través de apropiaciones más o menos intuitivas del entorno urbano o de reivindicaciones estructuradas y articuladas en torno a algún tipo de política territorial. Los movimientos urbanos de base se relacionan con los grassroots
(Hossein 2018) y se caracterizan por tener sus propios objetivos y agenda, no necesariamente dependientes de la de la política pública urbanística y de participación comunitaria institucional.

Suelen explorar estructuras organizativas alternativas que no se agotan en el ámbito local y en la dimensión comunitaria, sino que se articularse en redes de colaboración y solidaridad con otros
movimientos sociales permitiendo superar el “localismo militante” (Harvey 2008) y dando lugar a mecanismos de gobernanza urbana interescalar, desde lo particular a lo general. Sus repertorios de
acción son también intercalares e interdisciplinares: desde la acción directa in situ, generalmente a través de acciones didácticas, culturales, performáticas o ecológicas; hasta las acciones de veeduría ciudadana, visualización de datos, comunicaciones en prensa o redes sociales, elaboración de censos o investigaciones alternativas o la acción judicial.

Muchos de los movimientos sociales de base se enfocan en reivindicaciones relacionadas con su entorno urbano próximo, convirtiendo al barrio en la inscripción territorial que permite la elaboración
de un pensamiento colectivo. Las problemáticas que se abordan, aunque se ven reflejadas en la pequeña escala, suelen responden a crisis contemporáneas de origen supramunicipal e incluso
global (como el cambio climático o las migraciones). En este orden de ideas, la ciudad se vuelve un espacio propicio para ensayar mecanismos de gobernanza más equilibrada entre los distintos agentes urbanos, donde los movimientos sociales tienen un rol protagónico y los arquitectos podemos ejercer como traductores o facilitadores, con un enfoque cercano a la denominada
“Planificación radical o insurgente del territorio” (Miratfab 2009). En esta asignatura se fomentará la articulación y colaboración entre grupos de estudiantes y movimientos urbanos de base, entendiendo sus estructuras (territoriales, organizativas y tecnológicas), relacionándolas con referentes teóricos y formulando y ejecutando una estrategia de acción-colaboración conjunta.

Este curso tiene el objetivo de complementar los contenidos de clases precedentes cuyo eje temático ha sido la ciudad. Propone una mirada crítica sobre el tema del espacio abierto de Bogotá, a veces mal llamado “no construido”, otras veces “público” y en contadas ocasiones “colectivo”. Diferenciar, cualificar y debatir esas diferencias es nuestro propósito principal.

Denominado de la misma manera desde hace ya varios años, nunca reproduce las actividades y contenidos de los semestres precedentes. En etapas sucesivas va presentando nuevos temas y enfoques que si bien parten de la comprensión de Lo Público en la ciudad, adopta diferentes enfoques, lugares de trabajo y énfasis de acuerdo no solamente con lo que sea más oportuno y/o actual en el momento, sino, con los diversos intereses de los estudiantes.

Colombia es un país que ha vivido en un conflicto permanente durante las últimas cinco décadas. Con la firma del Tratado de Paz en el año 2016, el país viene buscando la manera de ponerle fin a la guerra y de lograr la reconciliación entre distintos sectores de la población, una tarea que nos corresponde a todos. Para este momento en que se requieren procesos urgentes de diálogo, no sólo entre actores armados sino entre los distintos estratos de la sociedad, el aprendizaje activo que propone la colaboración entre comunidades de distintos estratos sociales y estudiantes se presenta como una oportunidad que puede ayudar a la reconstrucción del tejido social.

Las acciones urbanas son un ejercicio que, basado en la metodología Investigación - Acción Participativa (IAP), busca un contacto directo y real con el entorno que ayude a fortalecer los lazos sociales y a su vez, los procesos de enseñanza. Tienen como propósito desarrollar intervenciones que mejoren la calidad de vida en distintos espacios de la ciudad y a su vez, ayuden a reconstruir el tejido social a través de la formulación y puesta en marcha de acciones que, con un presupuesto mínimo y una ambición grande, planteen soluciones a problemáticas cotidianas. Estas son siempre planeadas y realizadas con la comunidad que habita los sectores estudiados.

Alineado con la propuesta de que ‘la arquitectura es una de las disciplinas en las que es más evidente la posibilidad de reducir la brecha entre ciencia y arte’ este curso electivo investiga y fomenta los intercambios entre arte, ingeniería y arquitectura. En primer lugar propone el concepto estructural de Tensegridad como herramienta de análisis y método crítico y en segundo lugar el concepto artístico de Construcción planteado por los Constructivistas Rusos, como referente plástico para sintetizar y avanzar los aprendizajes del análisis, a través de la producción de
Construcciones Analíticas (objetos físicos o digitales).

El ‘Elementary Equilibrium’ (módulo mínimo de un sistema en tensegridad) es en sí mismo un objeto emblemático del entendimiento del arte, la arquitectura y la ingeniería como unidad, y del cual se derivan las tres ‘Dimensiones a Compresión’ de análisis que guiarán el desarrollo del curso: alma, espacialidad y técnica. Sin embargo, se busca trascender el análisis, pues el fin último no es solo ‘entender el referente’ sino incentivarlos a que se apropien de él y a abstraer sus planteamientos y lógicas proyectuales. Esto con el fin de utilizarlos como punto de partida en la
producción de piezas escultóricas/artísticas desde la arquitectura, de cualidades similares a las Construcciones propuestas por los Constructivistas Rusos, las cuales reflejaban una inquietud por unificar la ingeniería y la arquitectura a través del arte, en pro de la construcción de una sociedad que, en su momento, debía estar en sintonía con las lógicas de la Revolución Industrial. Estas nuevas ‘Construcciones Analíticas’ que ustedes producen son la oportunidad para revisar, reconsiderar o avanzar inquietudes postuladas a lo largo de la historia de la arquitectura (en
proyectos construidos) a través de aproximaciones artísticas que materializan tanto los intercambios como la transversalidad entre el arte, la arquitectura y la ingeniería.

El énfasis enfoca el ordenamiento social, económico y ambiental del territorio desde la ruralidad. Es mirada curiosa desde lo transdisciplinar para abordar visiones integradoras entre lo natural con lo transformado; de lo rural con lo urbano. Aquello que define y separa lo rural de lo urbano, es un límite frágil políticamente establecido; inmerso en un ámbito quebradizo de áreas productivas, biodiversas, cuerpos de agua y reservas naturales que se transforman en asentamientos humanos o en áreas de explotación que consumen el territorio. Por esta razón, es necesario comprender el ámbito del espacio intermedio, ubicado entre lo rural y lo urbano, para aportar lógicas, estructuras y funcionalidades que establecen ordenamiento, planeación y urbanismo.
La correcta conceptualización de instrumentos como la LOOT, los planes de ordenamiento territorial (POT, PBOT, EOT), los POD y los Planes Parciales permiten establecer estrategias y mecanismos que propician el desarrollo rural y urbano, o para entender la importancia de lo rur-urbano como lugar que, establece sostenibilidad y sustentabilidad.
Así, la relación con lo rural significa una lectura de conservación, rehabilitación y mantenimiento de recursos hídricos, de flora y fauna. De fronteras y áreas agrícolas para asegurar soberanía alimentaria. Implica desde el espacio intermedio abordar el territorio cuyas lógicas definen procesos que imponen restricciones para transformar lo natural y fortalecer la planificación
formal del territorio.

El constante aumento de los estándares de calidad de vida, de calidad de recintos en función a su uso, la densificación de las ciudades, el desarrollo de tecnologías y sistemas constructivos más eficientes y la sensibilización del ciudadano frente al ruido, se han convertido en factores ambientales de creciente protagonismo que impulsan la demanda de formación profesionales para su estudio y control. Así mismo, la arquitectura es una de las principales condicionantes de la calidad acústica de los espacios y las ciudades, por lo que a través del curso se ofrece una oferta formativa integral de formación básica para introducir en los diferentes campos de la acústica desde un punto de vista arquitectónico, técnico, ético y profesional.

El curso Cambio Climático, Ciudad, Arquitectura y Comunidad examina el entorno urbano como causa y solución a los efectos del cambio climático. Así pues, la ciudad se reconoce como el principal contribuyente de las emisiones de gases de efecto invernadero y, a su vez, se propone como oportunidad para fomentar eficiencias y reducir nuestra huella de carbono.

 El curso explora el concepto de Resiliencia desde una mirada integradora entre lo social, lo ambiental, y lo económico, y reconociendo la función del diseño urbano y la arquitectura como escenario y canal para la generación de cohesión social y adaptabilidad, ambos componentes esenciales para afrontar los efectos del cambio climático.

 El curso incentiva una mirada multidisciplinar del cambio climático y promueve un pensamiento critico que permita incorporar soluciones informadas a la arquitectura. El curso ofrece un marco político y del Desarrollo Resiliente para promover el involucramiento de los estudiantes en debates actuales y la incorporación de ideas innovadoras en su pensamiento arquitectónico.

En el quinto piso del Instituto de Arquitectos de Brasil, en la calle Bento Freitas de São Paulo, se encuentra Dulcinea. Trabaja allí hace tiempo. Al entrar encontramos un espacio iluminado por la fachada de vidrio que da a la calle. Una columna gris azulada revela su presencia a contraluz. El espacio se divide de forma desigual a través de una estantería invadida de libros, archivos, y
planos. De un lado, las mesas de dibujo se agrupan en fila india hasta detenerse frente al cuerpo amarillo de una planoteca. Las maquetas en hierro y cartón se acomodan sobre las superficies libres. Escuadras, compases, afiches y algunos inventos cuelgan de las paredes. El muro del fondo se esconde detrás de una enorme pizarra de color verde. Del otro lado, lápices, escalas, una lupa y una la lámpara de pescuezo metálico ocupan las otras mesas. Guiados por una delgada columna de humo y tras evadir la estantería, adivinamos la silueta de Paulo Mendes da Rocha. Nos acercamos. La ceniza va cayendo cerca del cenicero mientras él observa con detenimiento un dibujo. (Luego nos contaría que el cenicero fue obsequio de un arquitecto muy prestigioso; aunque funciona mejor al revés). Al vernos se sorprende y una sonrisa nos saluda con un abrazo prolongado, como si nos conociera de toda la vida. (Quizás a Camila sí, ya que fue su profesor en la FAU).
Vamos a una mesa de madera sostenida por dos caballetes; a su espalda quedan el afiche de la XLII Bienal de Venecia y la convocatoria para un viernes 27 de Junio en defensa de la Cassa di Risparmio a Piazzale Roma.

La Clínica ArqDis es un curso electivo de 3 créditos donde los estudiantes trabajarán en equipos multidisciplinares de diseño y arquitectura con profesores y egresados para solucionar proyectos reales con comunidades, empresas e instituciones en diferentes campos de la arquitectura y el diseño. Este curso brinda la oportunidad de poner en práctica las habilidades aprendidas durante la carrera de una forma práctica en el ámbito profesional. La Clínica toma el formato de un curso de 16 semanas, en el que los estudiantes deberán de trabajar 9 horas a la semana (3 en conjunto con profesores y 6 individualmente) en proyectos profesionales con comunidades, organizaciones y empresas de diferentes ámbitos.
La Clínica ArqDis es una iniciativa de la Facultad de Arquitectura y Diseño para construir alianzas con empresas, organizaciones e instituciones establecidas en Colombia. Una plataforma dinámica que provea soluciones expertas a retos actuales, que agreguen valor a proyectos, productos y servicios existentes; uniendo el mundo organizacional con un nuevo mundo académico, enfocado en la aplicación de procesos y estrategias en contextos reales y en la creación y transferencia de nuevo conocimiento.

Con el objetivo de promover y fomentar la investigación en el pregrado, se ha propuesto que los grupos de investigación del Departamento de Arquitectura tengan un curso en el que sus miembros apoyen a los estudiantes en sus intereses en investigación y éstos, a su vez, puedan participar en las investigaciones que adelanta el grupo. La propuesta concuerda con el interés de la academia y las universidades de desarrollar procesos de investigación que ayuden a crear y, ampliar el conocimiento y que a su vez profundicen en temas nuevos y en aquellos que están por entenderse y elaborarse. Por tanto, la necesidad de entrenar investigadores se vuelve parte esencial de la formación de un estudiante de pregrado. Es por ello que el grupo de investigación Formas de Producción de la Arquitectura (FPA) del Departamento de Arquitectura abre este espacio que recibe en la universidad, el nombre de curso tipo PI.
Los cursos tipo PI reciben el apoyo de la Vicerrectoría de investigación y creación y cuentan con el apoyo permanente de un estudiante de doctorado de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de los Andes.

A partir de intervenciones de artistas sobre arquitectura y urbanismo y de proyectos específicos de colaboración entre artistas y arquitectos, este curso abordará la noción de espacio en Occidente, sus orígenes en el pensamiento cartesiano y newtoniano, y su enfática separación del movimiento, el cuerpo y el lugar. Una noción espacial  que convive y se debate con ese otro espacio, el real, el de la ciudad, la percepción y la experiencia.

Durante las clases, las problemáticas de carácter teórico serán discutidas desde un diverso conjunto de casos concretos: las intervenciones del artista Gordon Matta-Clark en la arruinada Nueva York de la década de 60, la proyección de las Torres de Ciudad Satélite en México DF entre Goeritz y Barragán, y la posterior construcción del Espacio Escultórico en las afueras de la UNAM. Asimismo, serán analizados el diseño y elaboración de las calzadas de Copacabana proyectadas por Burle-Marx en Río de Janeiro, la compleja historia de la construcción del Aula Máxima de la Ciudad Universitaria de Caracas por Calder y Villanueva, y la composición del Pabellón Phillips por Le Corbusier y Xenakis. Igualmente, serán discutidas intervenciones de grafiti urbano de las últimas décadas, tales como Banksy o Binho Ribeiro y su implícita confrontación entre espacio público y poder.

Este curso es un espacio para pensar en la arquitectura como un medio capaz de establecer vínculos entre diversas formas de vida, humana y no humana, revisando modelos de pensamiento menos antropocéntrico y más abierto a la creación de acuerdos entre especies. Dentro del desarrollo del curso se abordarán temas  como la autogestión, el artefacto crítico y la instalación urbana a través de experimentos espaciales en diversos formatos y escalas.